En el día de la mujer, recordando el horror de la muerte que atrapó a un grupo de mujeres, allá, en el norte.

Fanthy Velarde

Yo escribía versos para mí misma a todas horas
para calmar las aguas turbias de esta angustia, buscar respuestas
dormir algunas horas, ó sólo para reafirmar mi amor 
por la alegría de vivir y la belleza.

Infatigable trabajador de la memoria cultural de Bolivia

Elías Blanco Mamani:

Carlos Soria Galvarro

Cuando las personas llegamos a una edad más que madura, solemos contar el tiempo ya no por meses ni años, sino por décadas o fracciones de siglos. En tal sentido, permítanme decirles por ejemplo, que el pasado año cumplí un medio siglo de vida consciente sobre el entorno político de nuestro país, la mitad exacta de ese tiempo como militante cotidiano al ciento por ciento de una organización política por medio de la cual pensábamos alcanzar la utopía, y la otra mitad como solitario batallador por la justicia, la democracia y la libertad, ejercitando básicamente las armas de la escritura. Decirles también que, con algunas intermitencias forzosas como el exilio o la clandestinidad, radico en La Paz hace casi cinco décadas, que tengo hijos con arriba de las 4 décadas y conozco a Elías Blanco Mamani, desde hace más de dos.